El tiempo huye con el vuelo de los pájaros, que junto a las nubes, estrellas y años se van quedando en las personas. ¿Pasamos por el colegio en nuestro rol de estudiantes, profesores, administrativos, Hermanos o Auxiliares? ¿O es el colegio el que pasa por nosotros?
En 1974 el Diego Echeverría era un lugar muy distinto al que conocemos hoy. El patio de Media tenía menos cemento y más árboles, incluso algunos animales que servían para mantener el pasto corto y ahorrar el dinero que no abundaba. El gimnasio, aunque parezca imposible de recrear, era un pequeño jardín donde había árboles que tenían que cuidar los más desordenados.
En 1974 un joven ex alumno llegaba al colegio a trabajar en el área mecánica y luego de 42 años se ha transformado en un símbolo del Diego. Admirado por generaciones, aplaudido por sus estudiantes. Frede Molina es parte de nuestra historia y hoy queremos que esa historia se proyecte hacia el futuro.
Como alumno del Diego, Frede fue miembro de nuestra Banda de Guerra y se transformó en protagonista de la construcción de muchos sectores colegiales. Pero, más allá de las insfraestructura, también Frede fue gestor de grandes beneficios que hemos logrado como docentes a través de su gestión en el Sindicato de Profesores.
Es el Taller Mecánico un lugar fundamental del Diego. En él se gestan amistades que duran toda la vida y se agiganta el carisma propio de un colegio que vive y se transforma desde lo Técnico Profesional. El Taller es un escenario privilegiado para poder entablar la fructífera relación educador estudiante, en medio del incesante trabajo mezclado en anécdotas.
Desde el día 10 de noviembre del año 2016, oficialmente el Taller Mecánico del Diego tendrá un nombre:
TALLER MECÁNICO FREDE MOLINA FLORES, NOTABLE PROFESOR QUE EDUCÓ 42 AÑOS A NUESTROS JÓVENES DESDE LA SENCILLEZ Y EL AMOR AL TRABAJO.