Esta tarea solo ha sido posible gracias a la labor tesonera de toda la comunidad educativa, que durante todos estos años ha tenido solo un propósito: lograr el reconocimiento y prestigio de sus estudiantes, quienes luego como Técnicos demuestran con hechos qué somos y qué podemos ser.

En efecto, muchos de nuestros ex alumnos son prestigiosos, destacados y orgullosos profesionales en todos los ámbitos de la economía, laborando en el sector público o privado. No son pocos los que se han aventurado como trabajadores independientes, logrando un gran éxito en sus emprendimientos.

Debemos recordar que estos profesionales, durante su estadía en el Diego, tuvieron problemas económicos, familiares o afectivos como los que sufren las nuevas generaciones. Sin embargo, antepusieron ante sus problemas las ansias de aprender y terminar una profesión, sabiendo que este esfuerzo al final del camino sería recompensado con creces.

Nos sentimos orgullosos de pertenecer al Diego, sabemos que su enseñanza técnica profesional está manifestándose plenamente. Ya somos miles los que nos hemos formado en los gloriosos talleres maristas.

Durante la Semana Técnica vivimos el deporte, charlas, un desayuno fraterno con los jóvenes de Cuarto Medio, un almuerzo de camaradería de los profesores de Educación Media y el esperado Concurso Técnico Eduardo González Miranda.